Cuando estamos en una sala ubicados donde existe un ruido excesivo proveniente de altavoces de otra sala contigua, nos encontramos en una situación donde el sonido se transfiere de un recinto a otro contiguo a otra y están separadas por una superficie divisoria con poca capacidad para el aislamiento acústico, y que además no absorbe lo suficiente el sonido, entonces cuando el altavoz actúa, las partículas de aire que lo rodean empiezan a transformarse y cambiando, chocando finalmente con la superficie divisoria.
Ésta superficie delimitadora entra en vibración perturbando a su vez las partículas de aire de la sala contigua. Por lo tanto se genera un nuevo foco de emisión sonora. Para ello disponemos de cortinas acústicas que a la vez amortiguan el sonido y reducen los decibelios.
El coeficiente de absorción de un material acústico tiene la relación entre la energía absorbida por el material y la energía reflejada por el mismo. Dada esta formulación su valor siempre esta comprendido entre 0 y 1. El máximo coeficiente de absorción esta determinado por un valor de 1 donde toda la energía que incide en el material es absorbida por el mismo, y el mínimo es 0 donde toda la energía es reflejada.
El coeficiente de absorción varía con la frecuencia y por tanto los fabricantes de materiales acústicos dan los coeficientes de absorción por lo menos en resolución de una octava.
Sabiendo los materiales de una sala y sabiendo sus coeficientes de absorción podemos saber como sonora esa sala en cada frecuencia y podremos también saber, mediante la formula de Sabine, Eyring etc., el tiempo de reverberación también por frecuencias.
Con las cortinas Tapicoustic de absorción acústica se logrará una considerable atenuación dl sonido ya que no deja pasar a través de este tejido sintético de alta tecnología que aumenta en 5 veces la capacidad que unas cortinas normales tienen de bloquear el sonido. Absorbe las ondas sonoras y sin eco no hay sonido, o al menos se neutraliza.
Están pensadas especialmente para áreas comerciales, restaurantes, oficinas, vestíbulos de hotel. De fabricación española además son retardantes del fuego M1.
Normas UNE EN ISO 16283-1, para medición aislamiento acústico y UNE EN ISO 3382-2 para reverberación.